CASO SWATCH
En 1983, la industria relojera suiza estaba en serios problemas, la mayoría de las empresas cerraron y habían perdido un 28% de participación en el mercado, pasando del 43% al 15% en todo el mundo. La razón principal de esto fue que en 1970 las empresas de relojes japonesas (Seiko, Citizen y Casio) empezaron la famosa crisis del cuarzo al reemplazar los relojes mecánicos por mecanismos de cuarzo con una pantalla digital. De esta forma, tenían precios más económicos, se podían fabricar en serie y de forma más rápida. Los suizos tuvieron que analizar las variables del macroambiente para definir bien cómo podrían sobrevivir y así nació Swatch, una fusión entre las empresas: General Company of Swiss Watching y Société Suisse pour l’Industrie Horlogère.
En este caso, podemos ver claramente cómo lograron analizar las siguientes macroambientales:
- Variables competitivas: las empresas japonesas y otras asiáticas entraron al mercado para competir por precios y producción en serie. Luego, Swatch tuvo que reducir el número de piezas de 91 a 51 piezas, utilizar material de plástico y automatizar la producción para poder competir.
- Variables tecnológicas: tenían una nueva tecnología más económica e innovadora con el reloj de cuarzo con pantalla digital. Swatch mantuvo el estilo de sus relojes pero utilizando el mecanismo con menos piezas, demostrando así una fusión entre lo tradicional y lo nuevo.
- Variables socioculturales: estos relojes eran la nueva moda, pero la gente compraba solo un ejemplar. Swatch aprovechó para innovar en el mercado lanzando de 2 a 4 colecciones al año, convirtiendo el reloj en una prenda de vestir en función de las tendencias del mercado.
La empresa para poder competir con los japoneses tuvo que buscar diferentes soluciones y el resultado fue que en los dos primeros años Swatch ya era un éxito con más de 2,5 millones de relojes vendidos, y en la década de los 80 era una fiebre en Estados Unidos.
La gran pregunta hoy es qué pasará con Swatch en los próximos años, porque ahora después de 40 años ha aparecido en el mercado un nuevo competidor que son los relojes inteligentes, en 2019 Apple vendió 31,1 millones de relojes dejando a todos los relojeros suizos juntos con 21,1 millones de relojes vendidos. Lo cierto es que incluso con varios intentos de crear un nuevo reloj inteligente y un sistema operativo, la empresa suiza está perdiendo la batalla contra Apple, Samsung, Huawei y Xiaomi. ¿De verdad quieren competir con estas marcas o seguir dentro del mercado tradicional? ¿Tiene Swatch algo guardado para sorprender a todos?
Parece que la marca tiene la intención de continuar en la línea tradicional ya que en su canal oficial de youtube solo muestra campañas de relojes tradicionales como la que podemos ver a continuación.
